Jiddu Krishnamurti - ¿Por que inventamos a "dios"?



Exelente video de un humano bien humano para sus cosas.

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http://www.jiddu-krishnamurti.net/es/index.php
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3 comentarios:

z-friend dijo...

Sr Krishnamurti ¿porque desacredita Ud. la religion?

Pregunta: ¿Por que desacredita Ud. la religión, que evidentemente contiene granos de verdad? ¿Por qué tirar al niño con el agua del baño? ¿No es necesario reconocer la verdad dondequiera se la encuentre?

Krishnamurti: ¿Qué entendéis por religión, señores? El dogma organizado, la creencia, el ritual, el culto de una persona por grande que sea, el recitar plegarias, repetir los Shastras, citar la Biblia -¿es eso religión? ¿O la religión es la búsqueda do la verdad, de Dios? ¿Podéis encontrar a Dios mediante la creencia organizada? Llamándoos hindúes y siguiendo todos los ritos del hinduismo o de cualquier otro “ismo”, ¿Hallaréis a Dios o la verdad? Lo que yo desacredito no es ciertamente la religión, ni la búsqueda de la realidad, sino la creencia organizada, con sus dogmas y con sus fuerzas e influencias separativas. Nosotros no buscamos la realidad sino que estamos atrapados en la red de las creencias organizadas, de los ritos siempre repetidos. Toda esa historia la conocéis, y yo le llamo desatino, porque se trata de narcótico que distraen e impiden buscar; ofrecen escapatorias, con lo que embotan la mente y la tornan ineficaz.
Así, pues, nuestra mente se halla atrapada en la red de las creencias organizadas, con todo su sistema de autoridades, sacerdotes y “gurús”, todo lo cual es engendro del miedo y del deseo de certeza; y estando atrapados en esa red, es obvio que no podemos simplemente aceptar sino que debemos inquirir, considerar y experimentar el hecho directamente, y ver qué es lo que nos tiene atrapados y por que lo estamos. Porque mi abuelo practicó tal o cual rito, o porque mi madre va a florar si yo no lo practico, es preciso que yo haga lo mismo. No hay duda de que semejante hombre, que depende psicológicamente de otros y por tal causa es miedoso, resulta incapaz de descubrir lo que es la verdad. Podrá hablar acerca de ella, podrá repetir el nombre de Dios infinidad de veces, pero no llega a nada ni tiene nada que ver con la realidad. La realidad lo esquivará porque él está encajonado en sus propios prejuicios y temores. Y vosotros sois responsables de esta religión organizada, sea ella de Oriente o de Occidente, de izquierda o de derecha, la cual, por el hecho de basarse en la autoridad, ha separado al hombre del hombre. ¿Para qué necesitáis autoridad, sea ella del pasado o del presente? Necesitáis autoridad porque os halláis confusos porque estáis sumidos en el dolor y en la ansiedad, porque os sentís solos y sufrís. Por eso deseáis que se os ayude desde afuera; y así creáis la autoridad política a religiosa, y habiéndola creado, seguís las instrucciones en la esperanza de que la confusión, la ansiedad, el dolor de vuestro corazón, sean alejados. ¿Puede otro ser quitaros vuestras penas, vuestro dolor? Otros podrán ayudaros a escapar al dolor, pero él siempre está presente.
Sois vosotros, pues, quienes creáis la autoridad; y habiéndola creado; os convertís en sus esclavos. La creencia es un producto de la autoridad; y como queréis escapar a la confusión, os veis atrapados en la creencia y por lo tanto continuáis en la confusión. Vuestros conductores son el resultado de vuestra confusión, por lo cual ellos tienen que estar confusos. Jamás seguiríais a nadie si fueseis claros, si no estuvieseis confusos y si experimentaseis directamente. Es porque estáis confusos que no existe para vosotros la experiencia directa. Con vuestra confusión creáis al líder, la religión organizada, el culto separativo, lo cual produce la lucha que se desarrolla actualmente en el mundo. En la India asume la forma de conflictos “comunales” entre musulmanes e hindúes, en Europa son los comunistas contra los de la derecha, etc. Si lo examináis con cuidado, si los analizáis, veréis que todo se basa en la autoridad, en que una persona dice esto y otra persona dice aquello; y la autoridad la creamos vosotros y yo porqué estamos confusos. Esto, verbalmente, podrá parecer simplificado con exceso; pero si lo ahondáis no es simple sino extremadamente complejo. Estando confusos, deseáis que se os saque de la confusión, lo cual significa que no comprendéis el problema de la confusión y que sólo buscáis una escapatoria. Para comprender la confusión, debéis comprender a la persona que causa la confusión, o sea vosotros mismos; y si no os comprendéis a vosotros mismos, ¿de qué sirve seguir a alguien? Estando confusos, ¿creéis acaso que hallaréis la verdad en alguna práctica o religión organizada? Aunque estudiéis los Upanishads, el Gita, la Biblia o cualquier otro libro, ¿os creéis capaces de leer su verdad cuando vosotros mismos estáis confusos? Traduciréis lo que leáis, y lo haréis conforme a vuestra confusión, a vuestros gustos y aversiones, a vuestros prejuicios, a vuestro condicionamiento. No os acercáis por cierto, a la realidad. Encontrar la verdad, señor, es comprenderse a sí mismo. Entonces la verdad viene a vosotros; no tenéis que ir hacia la verdad, y en eso consiste en belleza. Si vais hacia la verdad, aquello a que os acercáis ha sido proyectado de dentro de vosotros mismos, y por lo tanto no es la verdad. Ello se convierte entonces en un mero proceso de autohipnosis que es la religión organizada. Para encontrar la verdad, para que la verdad venga a vosotros tenéis que ver muy claramente vuestros propios prejuicios opiniones ideas y conclusiones; y esa claridad os viene gracias a la libertad que es la virtud. Para la mente virtuosa, la verdad está en todas partes. Entonces no pertenecéis a ninguna religión organizada, entonces sois libres.
La verdad, pues, manifiéstase cuando la mente es capaz de recibirla, cuando el corazón está vacío de las cosas de la mente. Hoy en día nuestro corazón está lleno con las cosas de la mente; y cuando el corazón se libera de la mente entonces es receptivo, sensible a la realidad.

Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Unknown dijo...

Lástima , una gran pérdida para este mundo la partida de Krishnamurti.Pero sin duda ha de ser un inmenso aporte, un gran maestro en la otra dimensión, sobre todo para aquellas almas que al igual que en este mundo ni siquiera comprenden sus sabias palabras, pues su temor y cobardía a investigar ,saber o escuchar la verdad .....es más fuerte.